Proyectos Sociales de Equinoterapia

En Horseway estamos comprometidos con la educación emocional de los niños y  adolescentes. Es por ello que hace más de 4 años que gestionamos proyectos de educación emocional y otros proyectos relacionados. Gracias a estos proyectos, los chicos, «trabajan» sus dificultades personales a través de los caballos, evocando sueños, visualizando miedos y definiendo objetivos vitales que marcarán esta etapa de paso a la vida adulta.

Que mejor que ellos mismos para contar cómo se sienten y que les aporta la terapia.

Educación Emocional para Adolescentes Tutelados

Benefactor a Fundació Nous Cims | 48 adolescentes

Cada quince días, grupos de 8 (ocho) adolescentes acuden a Horseway a sus sesiones de 3 horas para trabajar de manera transversal:

  1. Como soy, quién soy.
  2. Me relaciono con asertividad.
  3. Asumo mi responsabilidad y las consecuencias que generan mis acciones.

Utilizamos el concepto de manada para sentir que forman parte de algo, con todo lo que eso conlleva: comunicación, empatía, cohesión grupal y responsabilidad; fomentando así las habilidades sociales.

Cohesión y supervisión de equipos

Benefactor a Fundació Nous Cims

Las IIAACC ofrecen la posibilidad de trabajar las dinámicas de los equipos de trabajo, revisando las sinergias de los miembros, los puntos débiles y las fortalezas así como consensuar nuevas dinámicas que puedan crear equipos más sólidos, cohesionados y con mayor comunicación.

Cuando los centros de trabajo y sus miembros tienen un largo recorrido, se instalan dinámicas que a veces no satisfacen a todos los componentes y la comunicación va mermando en pro de los posicionamientos de cada persona. Revisar el rol de cada uno/a y encontrar objetivos comunes, ayudará a sanar los equipos y mejorar la calidad de la intervención profesional. Los caballos acompañan estos procesos sin emitir juicio alguno, de tal manera que lo que se observa es lo que parece y viceversa.

Reparación del vínculo a través de la Equinoterapia

Benefactor a Fundación F. Campo | 4 familias

Este proyecto arrancó en 2016 y las familias asisten a Horseway para reparar el vínculo que se ha visto dañado por una separación temprana, debido a las dificultades de cuidado que los progenitores han tenido en alguna etapa de la crianza.

Las sesiones son quincenales y trabajamos en grupos de 4 familias (progenitores e hijo/a) con el soporte de una psicóloga que apoya las intervenciones con los caballos.

A través del vínculo y el cuidado del caballo, las madres aprenden a vincular con sus hijos/as de una manera saludable, creando espacios de intimidad y escucha activa entre ellos.

Intervención con familias acogedoras y progenitoras

Cuando un/a menor/a es retirado del núcleo familiar la ley prioriza que sea acogido por algún miembro de la familia extensa (abuelos, tíos, etc). A veces los acogimientos presentan dificultades porque los adultos están en permanente conflicto y no saben preservar a los menores. Ésto plantea un escenario en el que nadie mira a los niños/as en sus necesidades y empiezan a mostrar síntomas de malestar: problemas de aprendizaje, conductas inapropiadas, falta de control de esfínteres, entre otras.

Los caballos nos permiten situar a los adultos en sus dificultades, atender lo que está pasando y llegar a consensos concretos que mejoren las relaciones familiares, para que las acogidas ofrezcan un panorama más positivo para los menores acogidos.

Empoderamiento parental a través de las Intervenciones Asistida con Caballos

En el momento que un/a  menor es tutelad/a, el mensaje que reciben los progenitores es que no están ejerciendo correctamente su ejercicio como padres. Las razones por las cuales los progenitores desprotegen a sus hijos son diversas: en algunos casos, sobre todo en los de violencia familiar, las progenitoras protagonizan una falta de seguridad y autoestima que las aboca a la pérdida de la tutela de sus hijos porque no tienen el soporte familiar ni social que necesitan en  momentos de crisis, desorientación o dificultad máxima. Hay que tener en cuenta que normalmente estas situaciones también van vinculadas a realidades de exclusión social y precariedad económica.

Los caballos nos permiten trabajar la autoestima, el autoconcepto, la comunicación y la conciencia emocional para que el proceso de recuperación pueda empoderar a los progenitores y dar soporte al éxito del retorno.